En manos de las guerrillas, las autodefensas o el narco

En manos de las guerrillas, las autodefensas o el narco

Infolatam

(Especial para Infolatam por Rogelio Núñez)-. ¿Quién tiene el monopolio de la violencia legítima en los países latinoamericanos? En la mayoría del territorio, el Estado, pero en algunos lugares aún subsisten grupos que se han beneficiado de la incapacidad de las autoridades para imponer el orden constitucional.

Uno de los graves problemas que afrontan muchos países de la región es que “el Estado no tiene el monopolio de la violencia legítima” y en muchas zonas de estos países quienes reinan no son las autoriades legítimas sino guerrillas, maras, crimen organizado o autofedensas.

Es muy posible que en América latina más que Estados fallidos, que salvo el caso de Haití no existen otros ejemplos, lo que se puede encontrar son zonas o regiones fallidas. Ocurre en pequeños y débiles países como Guatemala y Paraguay pero también en grandes como México, Colombia o Perú.

Asimismo, muchas de las fronteras se han convertido en polvorines donde está presente el contrabanado, el narcotráfico y hasta el terrorismo internacional. Es el caso de las fronteras entre Colombia y Venezuela, Colombia y Ecuador, la famosa triple frontera entre Argentina, Brasil y Paraguay y la frontera entre Guatemala y México.

El caso mexicano

En estas semanas ha saltado a la primera línea de las noticias los casos de Michoacán o Guerrero en México, donde el crimen organizado reina a su antojo y la sociedad se ha visto en la obligación de formar sus propias fuerzas de autodefensa.


Esta situación entronca con todos los problemas que padece este país en su guerra contra el narcotráfico desatada por Felipe Calderón en 2006.

“Hay partes en Michoacán y Guerrero donde el Estado mexicano no está presente. Y cuando en un territorio no existe el monopolio legítimo de la violencia física, otros se apropian de ese papel. Puede ser la misma comunidad que se arma para defenderse de otras comunidades o grupos delincuenciales”, comenta el analista del diario Excelsior Leo Zuckerman.

El secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, asegura que el objetivo central marcado en el Consejo de Seguridad Nacional es recuperar el territorio en Michoacán.


Enrique Peña Nieto: “El operativo que se inició hace varias semanas tiene por propósito lograr una recuperación territorial de la zona donde hay debilitamiento de las autoridades locales”.

Y el presidente ha admitido que el Estado no controla todo el territorio.

Enrique Peña Nieto reconoció que existen espacios en Michoacán que han sido ganados por el crimen organizado. “Por esto, el operativo que se inició hace varias semanas tiene por propósito lograr una recuperación territorial de la zona donde hay debilitamiento de las autoridades locales”.

De Colombia a Perú

Colombia fue un caso de libro en cuanto a “Estado fallido” en los años 80 y 90.

Las políticas de Álvaro Uribe (“la Seguridad Democrática”) y el apoyo de EEUU (Plan Colombia) sirvieron para reestablecer la preeminencia del Estado aunque aún a día de hoy las Farc, el narcotráfico o las Bandas armadas emergentes, las Bacrim, controlan parte del territorio.

Ya no son capaces de retar al Estado como hicieran los narcos de Pablo Escobar en los 80 y las Farc en los 90, pero aún miles de personas están bajo el dominio de estas fuerzas ajenas a la institucionalidad democrática.


En ese contexto se desarrolla el diáLogo de paz con las Farc, las cuales entre otras cosas aspiran a mantener cierta autonomía territorial sobre el Estado, las llamadas “reservas campesinas”.

Como apunta en el diario El Tiempo, Plinio Apuleyo Mendoza “Primer rasgo evidente e inquietante: las ZRC se encuentran ubicadas en territorios donde los campesinos están ocupados esencialmente en el cultivo de coca. Realidad inquietante. Todas, o casi todas las zonas de reserva campesina, se encuentran establecidas en la proximidad de frentes o bloques de las Farc”.

En Perú perviven a duras penas elementos de Sendero Luminoso, ahora una narcoguerrilla más que una guerrilla maoista como en los 80 y 90.

Tras la muerte de Alejandro Borda, “Alipio”; y de Marco Antonio Quispe Palimino, “Gabriel”, el ministro de Defensa, Pedro Cateriano, sostiene que “tarde o temprano Sendero Luminoso va caer”.

Pese a los golpes recibido el hecho de haber vinculado su suerte a la del nacotráfico provoca que los senderistas cuenten con recursos suficientes para seguir operando.

De Guatemala a Paraguay

En el último lustro Guatemala ha centrado la preocupación internacional pues se trata de un pequeño y débil Estado en el que el narcotráfico ha logrado penetrar (en especial Los Zetas mexicanos) llegando a controlar amplias zonas y corredores del país.


Los Zetas controlan la ruta del norte, en el departamento de Petén, fronterizo con México, y la de la franja transversal centro-norte, que incluye Quiché, Huehuetenango (también limítrofes), Alta Verapaz y Zacapa.

“Los trabajos de inteligencia han determinado que continúa la expansión de carteles mexicanos a territorio guatemalteco (…). Les interesa la ruta donde ellos se van a desplazar (…), penetrar instituciones como las comisarías de la policía, fiscales o algunos jueces”, llegó a comentar el presidente Otto Pérez Molina.

Los Zetas se han impuesto a lo largo de la ruta del norte, en el departamento de Petén, fronterizo con México, y la de la franja transversal centro-norte, que incluye Quiché, Huehuetenango (también limítrofes), Alta Verapaz y Zacapa.

El propio ministro del Interior, Mauricio López Bonilla lo admite cuando contestaba de esta manera a la precunta de si ¿hay territorios liberados?: “No exactamente bajo ese concepto, pero sí hay lugares donde han ejercido una gran influencia. El cuidado de inversiones a nivel del poder local lo que buscan es garantizarse que pueden trabajar con absoluta impunidad. Liberados sería, si el Estado no puede entrar, y si bien es cierto, durante el 2007 al 2012 la PNC abandonó 34 municipios, por conflictividad social, durante la gestión no ha ocurrido algo similar”.

Paraguay se ha unido ahora a esta lista de países con problemas para mantener el control territorial.


“Seremos implacables en restablecer el orden y la presencia del Estado en toda la República. Puedo asegurarles que no nos van a marcar la hoja de ruta, ni criminales, ni grupos armados”, ha cometado el propio Horacio Cartes.

Allí actúa el grupo terrorista y guerrillero del EPP que ha crecido gracias a la debilidad del Estado y a la crisis de gobernabilidad e institucional que padece este país (fin de 61 años de predominio colorado en 2008, destitución de Fernando Lugo en 2012 y gobierno interino entre 2012 y 2013).

El último ataque perpetrado por el grupo guerrillero denominado Ejército del Pueblo Paraguayo (EPP) que dejó cinco muertos en el centro del país, ha sido tomado como “un mensaje” para el recién asumido presidente Horacio Cartes, según el ministro del Interior, Francisco de Vargas: “Es un mensaje para el presidente Cartes. Esto ya es una guerra declarada contra la República”.

“Seremos implacables en restablecer el orden y la presencia del Estado en toda la República. Puedo asegurarles que no nos van a marcar la hoja de ruta, ni criminales, ni grupos armados”, ha comentado el propio Cartes.

He aquí, pues otros de los retos de los estados latinoamericanos: acabar con la impunidad de los grupos del crimen organizado y que le institucionalidad democrática llegue a todos los puntos del territorio