Familias de los Militares

Las mujeres de los generales.

11 de febrero del 2013
Por Redacción

México, 11 de febrero.- En la milicia ahora ya es más común hablar de mujeres. En estos momentos ellas ya tienen su espacio dentro del Ejército Mexicano y se pueden desarrollar casi en cualquier área dentro del mismo.

Pero hay mujeres que deben llevar la misma disciplina de la milicia aunque no usen el uniforme o porten las insignias propias de los elementos pertenecientes a esta organización. Así es, las esposas de todos aquellos elementos que se dedican a salvaguardar la seguridad nacional tienen sobre ellas una dura tarea.

Todos aquellos que se han formado dentro de la disciplina del Ejército deben adaptarse a las normas que se exigen, de esta manera sus parejas deben seguir los mismos pasos que ellos.

La disciplina es muy importante. Ellas necesitan asumir el papel que les corresponde y guardar la compostura, sin importar la situación a la que se enfrenten. Así, la opinión pública no conoce a las esposas de los Secretarios de la SEDENA. A pesar de lo anterior, ellas deben de seguir trabajando desde el anonimato.

Un ejemplo muy tangible es el de la esposa del General Guillermo Galván Galván, pues mientras él se desempañaba como servidor público en el periodo del Presidente Felipe Calderón, se divorció del militar. Ese hecho no fue bien visto hacia adentro del Ejército, pero sucedió, y nadie que no estuviera en las filas militares se enteró.

Durante todo este periodo los medios de comunicación sólo se enfocaron en la pelea que se le daba al narcotráfico por órdenes de Calderón Hinojosa. El día que Galván dejó su cargo la mayoría de los que estaban ahí se enteraron que la pareja sentimental del General saliente era una mujer diferente, que dicho sea de paso no es muy bien vista por los militares.

Un caso muy distinto es la esposa del General Salvador Cienfuegos Zepeda. La pareja del actual Secretario de la Defensa Nacional se enfrenta a la disciplina interna que tiene su marido, pues es conocido que el General no tiene facilidad de palabra y en el trato con la gente suele ser hosco, por lo que la labor de esta mujer debe ser doblemente valorada.

Ante la luz pública las parejas de los que tienen un alto mando dentro de las fuerzas armadas nunca deben de figurar, pero hacia dentro de la milicia ellas juegan un papel determinante, pues aunque no tengan como tal el cargo desempeñan funciones que ayudan a que los servidores públicos hagan mejor su labor.

Las esposas de los militares están ahí para apoyar a sus parejas en la dura tarea de resguardar la seguridad de los ciudadanos de este país