Guerrero, un desastre, su gobernador peor

Guerrero, un desastre, su gobernador peor
07 de abril del 2015

México, 7 de abril.- A estas alturas del caos, de la violencia irrefrenable, no se sabe qué es peor: la ignorancia del gobernador sobre las leyes mexicanas o su brutal incapacidad para enterarse de qué es la política mexicana, quién es el Presidente, cuál es el orden institucional que debe seguir.

Presuntamente, Beatriz Mojica era una punta de lanza del grupo perredista de “Los Chuchos” y por eso se decidió, en donde se debe decidir lo importante para el país, que no fuese gobernadora sustituta de Ángel Aguirre.

En su lugar nombraron a un individuo totalmente desconocido para el Gobierno federal. Como si el tema de gobernar pudiese decidirse en una tómbola, a ciegas. Y el ganador, Rogelio Ortega, un oscuro profesor universitario, ha demostrado que fue el peor de los errores.

Nada sustituye a la experiencia, a la capacidad política, a la formación partidista de un funcionario público. Nada enseña las reglas básicas del sistema político vigente de forma instantánea.

El susodicho señor Ortega había participado en una manifestación junto a los padres de los normalistas, vestido de blanco, se argumentó en su favor… Y ahora lo están pagando con creces.

Porque resulta que este personaje de la picaresca izquierdosa se tropieza con sus propios pies, y avienta declaraciones dignas de un premio a la incontinencia verbal. La más reciente en defensa de la tesis, totalmente contraria a la oficial, a lo que consta en documentos oficiales del Estado Mexicano, o sea de dónde forma parte, de que los jóvenes normalistas están vivos y en poder de un grupo criminal.

Porque era Semana Santa muchos no blasfemaron en Bucareli, pero tienen que haber visto cómo se incendiaban todos los esfuerzos para avanzar hacia la credibilidad social tan indispensable para el primer mandatario.

Además Ortega se atrevió a decir que está dispuesto a reunirse con un grupo criminal y a pagarles un rescate de la cantidad de dinero que sea para que, no reírse por favor, entreguen a los estudiantes oficialmente asesinados por lo que, además, hay casi cien personas en la cárcel en espera de ser juzgados.

El tema es totalmente disparatado. Y sirve, obvio, para alborotar un gallinero de por sí muy ruidoso. Que se reuniese con criminales, que les pagase un rescate son acciones totalmente ilegales.

Mientras este admirador de Cantinflas se tropieza con su propia sombra, en Acapulco mataron al jefe policíaco que comandaba, precisamente, la huelga de policías municipales. En la mañana, a bordo de un coche Dart, en compañía de su esposa y su hijo, asesinaron a Daniel Pérez Crisóstomo. Regresando así al más antiguo método de “solucionar” conflictos.

Lo mataron en Viernes Santo, con Acapulco lleno de turistas, con una pistola 38 que, casualmente, es el calibre de todas las armas de las policías locales.

¿Cómo puede eso suceder cuando, nos han dicho, en Guerrero hay todo tipo de autoridades federales y de operativos prioritarios para “devolver” la paz y la seguridad?

Y el gobernador Ortega ni por enterado. No le es redituable en su muy particular contabilidad existencial atender estas “obligaciones” de su cargo-encargo.

Los habitantes de Guerrero no tienen la culpa de la ocurrencia oficial, del más alto nivel de Gobierno, de nombrar al “ahí se va” a un gobernador. No se lo merecen como tampoco la nulidad de todas las acciones oficiales y federales en materia de seguridad.

El resto de los mexicanos no merecemos, tampoco, que Guerrero sea el principio del final…

Isabel Arvide

@isabelarvide

Estado Mayor

Nada sustituye a la experiencia, a la capacidad política, a la formación partidista de un funcionario público. Nada enseña las reglas básicas del sistema político vigente de forma instantánea.