Narcomenudeo, estrategia fallida

Narcomenudeo, estrategia fallida

10 de septiembre del 2012
Editorial EL UNIVERSAL

México, 10 de septiembre (El Universal).- Los fenómenos complejos, el del narcotráfico lo es, no pueden enfrentarse si no es de manera integral. Parte de ello supone combatir la ilegalidad y los crímenes relacionados con el traslado de estupefacientes hacia el exterior de nuestro país. Pero en los últimos años se han demostrado que esa no es la única dimensión del crimen organizado; hay muchas más. Una de ellas es la que se víncula con el consumo y distribución de drogas a nivel local. Debido a ello, el diseño de estrategias para atender el problema del narcomenudeo se ha convertido en una de las piezas clave para que la lucha contra la delicuencia organizada en su conjunto pueda tener efecto. Sin embargo, de acuerdo con la información publicada hoy por EL UNIVERSAL, las estrategias contra el narcomenudeo no han tenido la eficacia esperada.

De acuerdo con esta información el combate al narcomenudeo se encuentra actualmente marcado por la impunidad, la falta de impartición de justicia y la inefectividad en cuanto las consignaciones y sentencias.Más aún, los resultados de los expedientes analizados, a decir de especialitas, demuestran que las investigaciones, detenciones y sentencias, no están teniendo los resultados qu se necesitan en cuanto abatimiento del fenómeno no han terminado en desmantelamiento de centros o redes de distribución de estupefacientes.

Lo anterios, desafortunadamente, exhibe una estrategia fallida en esta materia que merece replantamientos urgentes. El narcomenudeo es el eslabón más bajo, y por lo que se desmuestra, también es más débil de la cadena del tráfico de drogas. Un combate al crimen organizado que no incluya medidas eficaces para acabar con lo que sucede a nivel micro en nuestros barrios y en nuestras ciudades, no puede tener éxito en el largo plazo.

Por consiguiente, es imprescindible que se asuma que las acciones que hasta ahora han sido puestas en marcha no han funcionado como se necesita. La Legislación imperante y su aplicación deben contar con la eficacia requertida para actuar como disuasores y para conseguir golpear las estructuras del crimen organizado en cuanto a sus redes de control y distribución, Pero no podemos sustentar la lucha contra el narcomenudeo exclusivamente en estrategias punitivas. Se requiere implementar medidas de prevecnión que aitendan la problemática de raíz, desde el consumo y las adicciones, hasta la distribución de drogas a nivel local.

En estos tiempos de transición, se presenta una oportunidad de replantear lo que hasta ahora se ha hecho en la materia, La lucha del Estado en contra del crimen organizado no puede tener éxito si el eslabón más bajo de esta cadena permanece en las circunstancias actuales.