Veracruz: matan a 4 al intentar rescate de cuerpo de líder zeta

Veracruz: matan a 4 al intentar rescate de cuerpo de líder zeta

La Redacción
29 de diciembre de 2012 · 5 Comentarios
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MÉXICO, D.F. (proceso.com.mx).- Cuatro presuntos integrantes del crimen organizado fueron asesinados anoche por fuerzas del orden al intentar rescatar el cuerpo de Ángel Enrique Uscanga Marín, El Pokemón.

El Pokemón, presunto líder de Los Zetas en Veracruz, fue abatido por la Marina en Córdoba este jueves.

El gobierno de esa entidad informó en un comunicado que “fuerzas del orden repelieron una agresión y abatieron a cuatro delincuentes quienes intentaban sustraer el cuerpo de Ángel Enrique Uscanga Marín, alias El Pokemón, identificado como líder del grupo delictivo Los Zetas en la región”.

El incidente sucedió anoche cuando sujetos armados dispararon desde un vehículo contra agentes del orden que resguardaban las instalaciones donde se encuentran los cuerpos de cinco supuestos delincuentes abatidos durante un operativo realizado el pasado jueves 27 de diciembre.

Elementos del programa “Veracruz Seguro” establecieron un perímetro de seguridad para evitar que civiles resultaran heridos.

Al lugar llegaron autoridades ministeriales que dieron fe de los hechos e iniciaron las diligencias de ley.

Durante la acción fueron asegurados un vehículo, armamento y una granada que fueron puestos a disposición de la autoridad ministerial.

Acusan a soldados de matar a cuatro inocentes en Veracruz

Noé Zavaleta
2 de enero de 2013 · Sin comentarios
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XALAPA, Ver. (apro).- Alrededor de 500 personas marcharon este miércoles en el municipio de Ixhuatlán del Café, para protestar contra soldados del Ejército que el pasado 28 de diciembre dieron muerte a cuatro lugareños al confundirlos con presuntos zetas.

Los manifestantes, entre los que se encontraban familiares de las víctimas, aseguraron que éstos no eran sicarios del crimen organizado ni tenían relación con el cártel de Los Zetas.

“No merecían morir”, “no eran sicarios”, se leía en las pancartas que llevaban consigo amigos y parientes de José Raúl Fernández Ortiz, de 28 años (conductor de un taxi); Jesús Juárez, Luis Vargas Piña, ambos de 37 y Ángel Piña Teodoro, de 32.

En la marcha, los manifestantes censuraron también el hecho de que la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) haya difamado a las víctimas boletinándolas como presuntos delincuentes.

Según el comunicado difundido por la Sedena, las víctimas pretendían rescatar a Ángel Enrique Uscanga, Pokemón, líder zeta en Veracruz, cuando en realidad José Raúl se ganaba la vida como taxista y los otros tres, como mecánicos.

Con los ataúdes como avanzada de la protesta, los habitantes de Ixhuatlán del Café, municipio cercano a Córdoba -donde fueron abatidos los presuntos delincuentes-, recorrieron las principales calles del municipio y con pancartas en mano señalaron que los cuatro hombres abatidos por el Ejército eran víctimas y no sicarios.

Exigieron justicia para sus familiares abatidos el pasado 28 de diciembre en la avenida 5, entre las calles 6 y 8 de Córdoba, luego de que salían de un bar e ignoraron una orden de los militares en un retén. Los uniformados abrieron fuego contra los tripulantes del taxi.

La madrugada del 29 de diciembre, la Procuraduría General de Justicia (PGJ) informó en un comunicado: “Fuerzas del orden repelieron una agresión y abatieron a cuatro delincuentes, quienes intentaban sustraer el cuerpo de Ángel Enrique Uscanga Marín, alias El Pokemón, identificado como líder del grupo delictivo en la región.”

Reporteros de la ciudad de Córdoba, Veracruz aseguran que la noche del presunto enfrentamiento, trascendió que el taxi habría atropellado a un motociclista en la avenida 5 y calle 4, por lo que intentó escapar sobre la avenida sin percatarse que el sitio estaba acordonado por las fuerzas militares. En el asiento trasero del taxi fueron halladas latas de cerveza.

Critican activistas la ejecución de 4 personas en Veracruz
Peña Nieto sigue la misma estrategia de seguridad de Calderón: Cortez

Fernando Camacho Servín

Periódico La Jornada
Sábado 5 de enero de 2013, p. 8

La ejecución de cuatro personas en la ciudad de Córdoba, Veracruz, acusadas sin pruebas por la Marina de haber tratado de rescatar el cuerpo de un presunto narcotraficante, demuestra que el gobierno de Enrique Peña Nieto sigue aplicando la misma estrategia de seguridad que Felipe Calderón, basada en el uso excesivo de la fuerza, la falta de investigación de los casos y el encubrimiento a los responsables de los abusos, lamentaron activistas de organizaciones sociales.

Édgar Cortez, investigador del Instituto Mexicano de Derechos Humanos y Democracia, afirmó que el asesinato de los cuatro hombres –todos ellos originarios del municipio de Ixhuatlán del Café– deja ver que no ha cambiado en nada el modus operandi de las fuerzas armadas en sus tareas de seguridad pública, a pesar de que formalmente ya hay un nuevo gobierno en el país.

"La lógica del Ejército y la Marina es que todos somos sospechosos hasta que demostremos lo contrario. Continúa la tendencia de detener y ejecutar y luego averiguar, cuando debería ser al contrario", subrayó.

De igual forma, las autoridades siguen justificando los errores y abusos de las uniformados, con el argumento de que si alguien fue privado de la vida fue porque estaba cometiendo un delito, pero sin sustentar sus dichos con investigaciones sólidas.

Para el especialista, el hecho de que la administración de Peña Nieto tenga sólo un mes de iniciada no es pretexto para que no haya promovido cambios en esta materia. "Si empiezas a aplicar una estrategia distinta, de inmediato tendrías que ver resultados diferentes, pero no la hay. Hasta el momento no ha habido ningún planteamiento preciso al respecto, y los ciudadanos tenemos derecho de pedir resultados", dijo.

Manuel Olivares, secretario técnico de la Red Guerrerense de Organismos Civiles de Derechos Humanos, coincidió en que el gobierno del país sigue aplicando una política beligerante y militarista contra la población civil, pese a estar bajo la dirección de un nuevo partido.

“Lo que pasó en Veracruz no es nuevo. En varios estados siguen los ‘daños colaterales’ y no vemos que con Peña Nieto esto vaya a cambiar. Sólo se retomará tal cual estaba y con esto se seguirán provocando violaciones de derechos humanos muy graves”, alertó.

Para el activista, no es posible darle ningún plazo al gobierno actual para ver si hay cambios en su estrategia de seguridad pública, porque el fracaso de dicho esquema ya se comprobó en los seis años anteriores. "Basta con saber cuál es la esencia del Ejército para saber que ningún plazo sería suficiente", consideró.

Veracruz: bloquean carretera familiares de hombres abatidos por militares.

Noé Zavaleta
14 de enero de 2013 · 3 Comentarios
Narcotráfico

XALAPA, Ver. (apro).- Familiares y viudas de los cuatro habitantes de Ixhuatlán del Café abatidos por militares la noche del 28 de diciembre 2012, bloquearon diversos puntos carreteros en las entradas-salidas de los municipios de Huatusco, Coscomatepec e Ixhuatlán para exigir justicia y limpiar su nombre.

Con pancartas en mano y formando una barricada humana, los inconformes pidieron a la Procuraduría General de Justicia del estado (PGJ), a la Procuraduría General de la República (PGR) y a la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) que indaguen el caso para limpiar el nombre de Jesús Juárez, José Raúl Fernández Ortiz, Luis Vargas Piña y Ángel Piña Teodoro.

Acusaron que la muerte de sus parientes fue un acto de negligencia de la Sedena que no debe quedar impune.

Los manifestantes exigieron justicia y bloquearon diversos accesos carreteros minutos antes de las 8:00 horas.

Hasta esta tarde el cerco continuaba sin que alguna autoridad del gobierno de Veracruz o de la Sedena acudiera a dialogar con los inconformes.

El caos vehicular se intensificó en esa región montañosa del centro del estado debido a que la protesta coincidió con otra realizada por habitantes de la congregación de Presidaria –adscrita a Ixhuatlán del Café– y de Potrerillo de Coscomatepec, quienes exigían la pavimentación del camino a dichas comunidades.

El Ejército responsabilizó a Jesús Juárez, José Raúl Fernández Ortiz, Luis Vargas Piña y Ángel Piña Teodoro de intentar rescatar –el 28 de diciembre– el cadáver de Ángel Enrique Uscanga, El Pokemón, líder zeta en Veracruz abatido dos días antes, quien se encontraba resguardado en la funeraria Vélez bajo un fuerte dispositivo de seguridad.

El pasado lunes 31 de diciembre, los presuntos sicarios fueron sepultados en el panteón municipal en medio de protestas.

En su edición de esta semana, Proceso (1889) da cuenta de cómo la indignación y el coraje se apoderó de los habitantes de Ixhuatlán del Café pues taxistas, mecánicos y empleados del ayuntamiento aseguran que ninguno de los cuatro presuntos zetas abatidos –y catalogados así por las fuerzas castrenses– andaban en “malos pasos”.

“Ni armas sabían usar, era gente de bien, que vivía al día y que siempre estuvieron rodeados de pobreza”, dijeron familiares y vecinos.