Moderniza China sistema de misiles
Página 1 de 1.
Moderniza China sistema de misiles
IMPRIMIR
Moderniza China sistema de misiles
NYT News Service
Washington DC, Estados Unidos (17 mayo 2015).- Tras décadas de mantener una fuerza nuclear mínima, China ha rediseñado muchos de sus misiles balísticos de largo alcance para llevar múltiples ojivas, un paso que, afirman funcionarios federales y analistas de políticas estadounidenses al diario New York Times, aparentemente tiene como fin hacer reflexionar a Estados Unidos al tiempo que se prepara para utilizar defensas antimisiles más robustas en el Pacífico.
Lo que hace que la decisión de China sea particularmente notable es que la tecnología de miniaturizar las ojivas y poner tres o más sobre un solo misil ha estado en manos chinas durante décadas.
Pero una sucesión de líderes chinos deliberadamente la dejó sin usar; no les interesaba meterse en el tipo de carrera armamentista que caracterizó la competencia nuclear entre Estados Unidos y la Unión Soviética en la Guerra Fría.
Ahora, sin embargo, el Presidente Xi Jinping parece haber cambiado de rumbo, al mismo tiempo que construye campos de aviación militares en islas en disputa en el Mar de China Meridional, declara exclusivas zonas de identificación de defensa aérea chinas, envía submarinos chinos a través del Golfo Pérsico por primera vez y crea un poderoso arsenal nuevo de armas cibernéticas.
Muchos de esos pasos han tomado por sorpresa a los funcionarios estadounidenses y se han convertido en evidencia del reto que enfrenta la Administración Obama al tratar con China, en particular después de que agencias de inteligencia de EU habían predicho que Xi se enfocaría en el desarrollo económico y seguiría el camino de su predecesor, quien abogó por el ascenso pacífico del país.
El Secretario de Estado John Kerry llegó a Beijing el sábado para abordar una variedad de asuntos económicos y de seguridad de interés para Estados Unidos, aunque no era claro si el tema de los misiles, que funcionarios describen como reciente, estaba en su agenda.
"A Estados Unidos le gustaría tener una conversación sobre los asuntos más amplios de la modernización nuclear y la defensa contra misiles balísticos con China", expresó Phillip C. Saunders, director del Centro para el Estudio de Asuntos Militares Chinos en la Universidad Nacional de Defensa, una institución académica financiada por el Pentágono donde asisten muchos del próximo cuadro de altos comandantes de las Fuerzas Armadas.
"Los chinos han estado renuentes a tener esa discusión en los canales oficiales", dijo Saunders, aunque él y otros expertos han participado en conversaciones extraoficiales con sus homólogos chinos sobre el asunto de las ojivas.
El nuevo programa nuclear de Beijing fue reportado dentro del anual reporte del Pentágono para el Congreso sobre las capacidades militares chinas, revelando un dilema para la Administración Obama, que nunca ha hablado públicamente sobre estos avances nucleares chinos.
El Presidente Obama está bajo más presión que nunca para desplegar sistemas de defensa antimisiles en el Pacífico, aunque la política estadounidense oficialmente declara que esos interceptores son para contrarrestar a Corea del Norte, no a China.
Al mismo tiempo, el Presidente intenta encontrar una manera de señalar que se resistirá a los esfuerzos chinos para intimidar a sus vecinos, entre ellos algunos de los aliados más cercanos de Washington, y para mantener a Estados Unidos fuera del Pacífico Occidental.
En el Pentágono ya se habla de acelerar el esfuerzo de la defensa antimisiles y de enviar barcos militares a aguas internacionales cerca de las islas disputadas, para dejar claro que Estados Unidos insistirá en la libertad de navegación, incluso en áreas que China reclama como su zona exclusiva.
Hans M. Kristensen, director del Proyecto sobre la Información Nuclear en la Federación de Científicos Estadounidenses, un grupo de investigación de políticas en Washington, calificó los nuevos despliegues de ojivas chinas como un mal día para la contención nuclear.
"La pequeña fuerza de China está creciendo poco a poco", comentó.
"Y sus capacidades limitadas están mejorando lentamente".
Para los funcionarios estadounidenses, la medida china encaja con una rápida transformación de su estrategia bajo Xi, actualmente considerado uno de los líderes más poderosos desde Mao Zedong o Deng Xiaoping.
Unas fotografías vívidas, divulgadas recientemente, de los esfuerzos chinos para reclamar tierras en islas disputadas en el Mar de China Meridional e inmediatamente construir campos de aviación en ellas, subrayaba para los creadores de políticas y planificadores militares de la Casa Blanca la velocidad y la intensidad de la determinación de Xi de alejar a potenciales competidores hacia mediados del Pacífico.
Eso ha incluido construir portaaviones y submarinos para crear una fuerza general que podría representar un reto creíble a Estados Unidos en el caso de una crisis regional.
Parte del programa de modernización militar de China ha sido dirigida directamente contra la ventaja tecnológica de Estados Unidos.
Beijing ha buscado tecnologías para bloquear los satélites de vigilancia y comunicaciones estadounidenses, y sus importantes inversiones en la tecnología cibernética -y sus exploraciones y ataques en redes computacionales de EU- son vistas por funcionarios de Estados Unidos como una manera tanto de robar propiedad intelectual como de prepararse para conflictos futuros.
La actualización de las fuerzas nucleares cabe dentro de esa estrategia.
"Esto es obviamente parte de un esfuerzo por prepararse para una competencia de largo plazo con Estados Unidos", dijo Ashley J. Tellis, asociado titular en el Fondo Carnegie para la Paz Internacional, quien fue alto funcionario de la seguridad nacional en la Administración de George W. Bush.
"Los chinos siempre temen la ventaja nuclear estadounidense".
Estados Unidos fue un pionero en el desarrollo de las ojivas múltiples. Las MIRV, siglas en inglés de vehículo de reentrada múltiple e independiente, se convirtieron en unas de las armas más temidas de la Guerra Fría.
El reporte del Pentágono, publicado el 8 de mayo, señala que el arma más poderosa de Beijing en la actualidad lleva ojivas MIRV. El misil balístico intercontinental es conocido como el DF-5 (por Dong Feng, o Viento del Este).
Copyright © Grupo Reforma Servicio Informativo
ESTA NOTA PUEDES ENCONTRARLA EN:
http://www.reforma.com/aplicaciones/articulo/default.aspx?id=542341
Fecha de publicación: 17 mayo 2015
Moderniza China sistema de misiles
NYT News Service
Washington DC, Estados Unidos (17 mayo 2015).- Tras décadas de mantener una fuerza nuclear mínima, China ha rediseñado muchos de sus misiles balísticos de largo alcance para llevar múltiples ojivas, un paso que, afirman funcionarios federales y analistas de políticas estadounidenses al diario New York Times, aparentemente tiene como fin hacer reflexionar a Estados Unidos al tiempo que se prepara para utilizar defensas antimisiles más robustas en el Pacífico.
Lo que hace que la decisión de China sea particularmente notable es que la tecnología de miniaturizar las ojivas y poner tres o más sobre un solo misil ha estado en manos chinas durante décadas.
Pero una sucesión de líderes chinos deliberadamente la dejó sin usar; no les interesaba meterse en el tipo de carrera armamentista que caracterizó la competencia nuclear entre Estados Unidos y la Unión Soviética en la Guerra Fría.
Ahora, sin embargo, el Presidente Xi Jinping parece haber cambiado de rumbo, al mismo tiempo que construye campos de aviación militares en islas en disputa en el Mar de China Meridional, declara exclusivas zonas de identificación de defensa aérea chinas, envía submarinos chinos a través del Golfo Pérsico por primera vez y crea un poderoso arsenal nuevo de armas cibernéticas.
Muchos de esos pasos han tomado por sorpresa a los funcionarios estadounidenses y se han convertido en evidencia del reto que enfrenta la Administración Obama al tratar con China, en particular después de que agencias de inteligencia de EU habían predicho que Xi se enfocaría en el desarrollo económico y seguiría el camino de su predecesor, quien abogó por el ascenso pacífico del país.
El Secretario de Estado John Kerry llegó a Beijing el sábado para abordar una variedad de asuntos económicos y de seguridad de interés para Estados Unidos, aunque no era claro si el tema de los misiles, que funcionarios describen como reciente, estaba en su agenda.
"A Estados Unidos le gustaría tener una conversación sobre los asuntos más amplios de la modernización nuclear y la defensa contra misiles balísticos con China", expresó Phillip C. Saunders, director del Centro para el Estudio de Asuntos Militares Chinos en la Universidad Nacional de Defensa, una institución académica financiada por el Pentágono donde asisten muchos del próximo cuadro de altos comandantes de las Fuerzas Armadas.
"Los chinos han estado renuentes a tener esa discusión en los canales oficiales", dijo Saunders, aunque él y otros expertos han participado en conversaciones extraoficiales con sus homólogos chinos sobre el asunto de las ojivas.
El nuevo programa nuclear de Beijing fue reportado dentro del anual reporte del Pentágono para el Congreso sobre las capacidades militares chinas, revelando un dilema para la Administración Obama, que nunca ha hablado públicamente sobre estos avances nucleares chinos.
El Presidente Obama está bajo más presión que nunca para desplegar sistemas de defensa antimisiles en el Pacífico, aunque la política estadounidense oficialmente declara que esos interceptores son para contrarrestar a Corea del Norte, no a China.
Al mismo tiempo, el Presidente intenta encontrar una manera de señalar que se resistirá a los esfuerzos chinos para intimidar a sus vecinos, entre ellos algunos de los aliados más cercanos de Washington, y para mantener a Estados Unidos fuera del Pacífico Occidental.
En el Pentágono ya se habla de acelerar el esfuerzo de la defensa antimisiles y de enviar barcos militares a aguas internacionales cerca de las islas disputadas, para dejar claro que Estados Unidos insistirá en la libertad de navegación, incluso en áreas que China reclama como su zona exclusiva.
Hans M. Kristensen, director del Proyecto sobre la Información Nuclear en la Federación de Científicos Estadounidenses, un grupo de investigación de políticas en Washington, calificó los nuevos despliegues de ojivas chinas como un mal día para la contención nuclear.
"La pequeña fuerza de China está creciendo poco a poco", comentó.
"Y sus capacidades limitadas están mejorando lentamente".
Para los funcionarios estadounidenses, la medida china encaja con una rápida transformación de su estrategia bajo Xi, actualmente considerado uno de los líderes más poderosos desde Mao Zedong o Deng Xiaoping.
Unas fotografías vívidas, divulgadas recientemente, de los esfuerzos chinos para reclamar tierras en islas disputadas en el Mar de China Meridional e inmediatamente construir campos de aviación en ellas, subrayaba para los creadores de políticas y planificadores militares de la Casa Blanca la velocidad y la intensidad de la determinación de Xi de alejar a potenciales competidores hacia mediados del Pacífico.
Eso ha incluido construir portaaviones y submarinos para crear una fuerza general que podría representar un reto creíble a Estados Unidos en el caso de una crisis regional.
Parte del programa de modernización militar de China ha sido dirigida directamente contra la ventaja tecnológica de Estados Unidos.
Beijing ha buscado tecnologías para bloquear los satélites de vigilancia y comunicaciones estadounidenses, y sus importantes inversiones en la tecnología cibernética -y sus exploraciones y ataques en redes computacionales de EU- son vistas por funcionarios de Estados Unidos como una manera tanto de robar propiedad intelectual como de prepararse para conflictos futuros.
La actualización de las fuerzas nucleares cabe dentro de esa estrategia.
"Esto es obviamente parte de un esfuerzo por prepararse para una competencia de largo plazo con Estados Unidos", dijo Ashley J. Tellis, asociado titular en el Fondo Carnegie para la Paz Internacional, quien fue alto funcionario de la seguridad nacional en la Administración de George W. Bush.
"Los chinos siempre temen la ventaja nuclear estadounidense".
Estados Unidos fue un pionero en el desarrollo de las ojivas múltiples. Las MIRV, siglas en inglés de vehículo de reentrada múltiple e independiente, se convirtieron en unas de las armas más temidas de la Guerra Fría.
El reporte del Pentágono, publicado el 8 de mayo, señala que el arma más poderosa de Beijing en la actualidad lleva ojivas MIRV. El misil balístico intercontinental es conocido como el DF-5 (por Dong Feng, o Viento del Este).
Copyright © Grupo Reforma Servicio Informativo
ESTA NOTA PUEDES ENCONTRARLA EN:
http://www.reforma.com/aplicaciones/articulo/default.aspx?id=542341
Fecha de publicación: 17 mayo 2015
Aquiles1- Inspector [Policia Federal]
- Cantidad de envíos : 209
Fecha de inscripción : 25/05/2013
Temas similares
» China moderniza su arsenal nuclear para poder responder en caso de ataque
» Chile Adquiere El Sistema de Misiles Noruego NASAMS
» EE.UU. ofrece a Rusia soluciones de su sistema anti misiles en Europa
» China pronto tendrá submarinos armados con misiles nucleares.
» Taiwán apuntará sus misiles contra China
» Chile Adquiere El Sistema de Misiles Noruego NASAMS
» EE.UU. ofrece a Rusia soluciones de su sistema anti misiles en Europa
» China pronto tendrá submarinos armados con misiles nucleares.
» Taiwán apuntará sus misiles contra China
Página 1 de 1.
Permisos de este foro:
No puedes responder a temas en este foro.