Yarmouk esta siendo aniquilado

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'Yarmouk está siendo aniquilado'
REFORMA / Redacción
Cd. de México, México (12 abril 2015).- La situación en el campamento de refugiados palestino de Yarmouk, sitiado por el Estado Islámico, está escapando a todo control, informó el diario británico The Guardian.

Si tienen suerte, Ahmad y su familia, refugiados en el campamento, lograrán una comida hoy: dos platos de arroz cocinado con agua no potable.

"Nos están matando aquí, el campamento de Yarmouk está siendo aniquilado", dice Ahmad, protegido bajo un seudónimo.

Yarmouk, antaño un activo suburbio de Damasco, la capital siria, con 200 mil habitantes, se muere de hambre tras dos años de ataques constantes del régimen del Presidente Bashar al-Assad, quién también ha bloqueado el suministro de agua durante meses, una táctica considerada como crimen de guerra por activistas.

Ahora, los 18 mil residentes restantes, muchos de los cuales sufren malnutrición o enfermedades ligadas al consumo de agua contaminada, son asediados por otro despiadado enemigo: el Estado Islámico, que se ha hecho con el control de la mayoría del campamento.

"La situación en el campamento es catastrófica", asegura Ahmad.

"No hay comida, electricidad ni agua. Daesh (Acrónimo árabe para el Estado Islámico) está matando y saqueando a los refugiados. Hay enfrentamientos, hay bombardeos", relata.

"Tan pronto como Daesh entró al campamento, quemó la bandera palestina y decapitó civiles".

Activistas del campamento informaron que entre 2 mil y 4 mil refugiados habían escapado, buscando protección en aldeas cercanas, pero aquellos que se quedaron afrontan un destino tétrico.

Los precios de los alimentos se han disparado. Una barra de pan cuesta más de 10 dólares.

Los malnutridos residentes de Yarmouk deben caminar kilómetros para comprar comida en la carretera hacia la aldea de Yalda, cuyos habitantes se están beneficiando del cese al fuego local entre el régimen sirio y la oposición rebelde. Pero la mayoría de los refugiados optan por mantenerse en sus casas para evitar resultar heridos o incluso muertos por balas perdidas, francotiradores o bombas de barril.

Se cree que cerca de 200 personas murieron en 2014 en Yarmouk a causa del hambre.

El material médico también escasea, con una gran falta de antibióticos y analgésicos para los heridos, afirma Salim Salamah, líder de la Liga Palestina para los Derechos Humanos en Siria y antiguo residente de Yamouk.

Sólo hay dos hospitales en todo el campamento, con un número muy limitado de personal médico. Uno de ellos fue impactado por una bomba de barril el jueves, aseguran los activistas.

Pero más allá de la crisis humanitaria, muchos palestinos de Yarmouk se sienten abandonados por le mundo árabe y la comunidad internacional.

"Lo que siento yo y la mayoría de la gente que se fue y sobrevivió es una decepción y tristeza absolutas, y un sentimiento de traición por parte de la comunidad internacional", confiesa Sammeh Salamah, el seudónimo de uno de los refugiados que logró escapar del campamento.

"Hay una crisis seria de moral y humanidad sobre lo que está pasando en Siria, de norte a sur, no sólo en Yarmouk".

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Fecha de publicación: 12 abril 2015